Un guerrero de la luz siempre mantiene
su corazón limpio de sentimientos de odio.
Cuando se dirige a la lucha, recuerda las
palabras de Cristo:”amad a vuestros enemigos”.
Y obedece.
Pero sabe que el acto de perdonar no obliga a
aceptarlo todo; un guerrero de la luz no puede
bajar la cabeza, pues de hacerlo perdería de vista
el horizonte de sus sueños.
Acepta que los adversarios están allí, para poner
a prueba su bravura, su persistencia, su capacidad
de tomar decisiones. Ellos lo obligan a luchar
por sus sueños.
Es la experiencia del combate lo que fortalece
al guerrero de la luz.
Pablo Coelho
me encanta!!!arriba esas guerreras de la luz!!!jejejeje, la verdad que a lo largo de mi vida este hombre me esta enseñando muchas cosas...un abrazo!!!
ResponderEliminar“Un guerrero de la luz nunca olvida la gratitud.
ResponderEliminarDurante la lucha, fue ayudado por los ángeles; las fuerzas celestiales colocaron cada cosa en su lugar y permitieron que él pudiera dar lo mejor de sí.
Por eso, cuando el Sol se pone, se arrodilla y agradece el Manto Protector que lo rodea.
Su gratitud, no obstante, no se limita al mundo espiritual; el jamás olvida a sus amigos, porque la sangre de ellos se mezcló con la suya en el campo de batalla.
Un guerrero no necesita que nadie le recuerde la ayuda de los otros; él se acuerda solo y reparte con ellos la recompensa.” (P cohelo)
De una guerrera victoriosa a otra, por las batallas ganadas (aunque vendrán más), por ser mi maestra en el arte del buen combate, que como dijo cohelo: Es el que entablamos en nombre de nuestros sueños (el agradecimiento es la memoria del corazón)
muchas gracias a las dos ese es mi mayor regalo el teneros cerca para poder medir fuerzas y sacarlas en el momento apropiado sabiendo que siempre hay guerreras cerca para no perder el equilibrio NAMASTE
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